Campaña Católica de Arkansas a Compartir de 2022

Publicado: February 5, 2022

El Obispo Anthony B. Taylor grabó la siguiente homilía sobre la Campaña Católica de Arkansas a Compartir, la cual se escuchó en todas las Misas en Arkansas, el 5 y 6 de febrero, 2022.

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Obispo Taylor

El año pasado, nuestra Campaña Católica de Arkansas a Compartir (CASA) por sus siglas en inglés — se llevó a cabo en medio de la pandemia de COVID-19 antes de que las vacunas estuvieran disponibles para la mayoría de nosotros.

Fue un tiempo de mucha incertidumbre y tomamos precauciones extraordinarias para intentar frenar la propagación de la enfermedad para así evitar que el número de enfermos excediera la capacidad de nuestros hospitales, y con especial preocupación por los más vulnerables entre nosotros. Creo que esta pandemia ha sido una llamada de atención para muchos de nosotros.

Nos hizo pensar en lo que es realmente importante y agradezco su cooperación, que ha sido muy buena. ¡Estamos todos juntos en esto!

Este año vengo a ustedes en medio del Sínodo sobre la Sinodalidad, un proceso de dos años a nivel mundial convocado por el Papa Francisco, un tiempo especial para caminar juntos y escucharse unos a otros. La meta de este proceso sinodal es ser más inclusivos bajo la guía del Espíritu Santo mientras miramos hacia el futuro como Iglesia.

El Papa ha pedido que prestemos especial atención a los marginados cuyas preocupaciones a menudo se pasan por alto. Esto incluye una escucha especial a aquellos que por algún motivo se han alejado de la vida de la Iglesia. Tal vez tengan dificultades con la enseñanza de la Iglesia o se sientan abandonados o hayan sido heridos de alguna manera. ¡El Papa quiere escuchar también la voz y las preocupaciones de ustedes, lo católicos que vienen todos los domingos!

El año pasado, a pesar de la pandemia y la consiguiente incertidumbre financiera que muchos de nosotros experimentamos, ustedes fueron muy generosos con nuestra campaña de CASA y hoy me presento ante ustedes para pedirles que hagan lo mismo también este año.

CASA paga los gastos de las operaciones de la diócesis que apoyan nuestro caminar juntos, incluyendo las oficinas que apoyan el ministerio que se lleva a cabo en su parroquia, como también los servicios y programas que van más allá de lo que cualquier parroquia podría hacer por sí sola. Por ejemplo, el año pasado ordenamos cinco nuevos sacerdotes y actualmente tenemos 40 hombres en formación para el diaconado permanente que serán ordenados en junio, y además hay actualmente 22 hombres estudiando para el sacerdocio.

En los años anteriores, les he dado una larga lista de oficinas y servicios que se financian a través de CASA. No ha habido ningún cambio en esa lista, que también puede encontrar en la edición de esta semana del Arkansas Catholic, por lo que no repetiré esa lista ahora.

Pero señalaré que muchas de las áreas de preocupación a nivel diocesano que hasta ahora han surgido más frecuentemente en nuestras consultas sinodales ya están siendo abordadas hasta cierto punto por ministerios financiados por CASA, incluyendo el ministerio hispano y el ministerio a jóvenes y jóvenes adultos.

Por eso, les pediré que sean generosos con su diezmo, devolviendo el 10 por ciento de sus ingresos que le corresponden al Señor. Nuestra regla general del diezmo es donar el 1 por ciento de sus ingresos anuales a CASA, el 5 por ciento a su parroquia local y el 4 por ciento a otras organizaciones benéficas, por ejemplo, escuelas católicas o caridades católicas.

¡Espero que todos ustedes donen a CASA generosamente este año especial del sínodo!

Nuestras vidas aún no son lo que eran antes de la pandemia que comenzó en el año 2020. ¡Recemos todos para que la vida vuelva pronto a la normalidad!  Aún nos queda mucho camino por recorrer en nuestro caminar juntos. Muchas gracias por su fidelidad y generosidad.